En estos momentos de incertidumbre, Codexca ha tomado todas las disposiciones que implica el Estado de Alarma. Hemos armado y mantenemos a TODO nuestro equipo con herramientas de teletrabajo y nos hemos atrincherado en nuestras casas para reducir la exposición y contribuir al bien general.

Somos una empresa valiente, que no tememos a las adversidades. Ya lo demostramos en la crisis anterior del 2008, donde con una gran incertidumbre, logramos salir adelante a base de esfuerzo y contención. Además, con la misma característica que define al soldado español, aprendimos a vivir con lo justo y a buscarnos la vida. Por eso, estamos dedicando más tiempo que nunca a innovar y a buscar soluciones que nos permitan mantener la operatividad a corto plazo.

Este virus no podrá con nosotros, ni con nuestros aliados, que son nuestros proveedores y clientes. En nuestra lucha, vamos a dar la cara y a establecer un plan de solidaridad económica para acelerar los pagos a nuestros suministradores. Ahora más que nunca se necesita que haya dinero en la calle. Al mismo tiempo, seguiremos al lado de nuestros usuarios, con independencia de si ahora tienen o no la liquidez para pagarnos. Este es un buen momento para desempolvar propuestas que estaban en estudio, para que escuches propuestas innovadoras, adaptadas a la realidad en la que estamos y que respondan a tus necesidades. No es momento de pensar en rentabilidades, sino de arrimar el hombro para estar juntos, porque unidos somos invencibles. En medio de la nube de incertidumbre en las que nos encontramos, queremos que nos acompañes, por eso no vamos a dejar a nadie atrás.

Si algo nos ha caracterizado en Codexca, en nuestros 20 años de vida, es que estamos habituados a realizar proyectos bajo cualquier circunstancia. No nos asustan las dificultades, ni tener que trabajar en entornos con alto grado de incertidumbre, con otras lenguas y culturas. Ya lo demostramos en proyectos anteriores, cuando salimos exitosos de Paraguay, Nicaragua, Belice, Senegal, Cabo Verde, Ghana, Madagascar, Alemania, Francia o en China, entre otros. Por eso, no tenemos miedo a implantar el teletrabajo para asegurarte que estaremos ahí. Tan sólo te pedimos que entiendas las circunstancias excepcionales en las que nos encontramos y que no te sorprendas si oyes a nuestros niños o el ladrido de nuestra mascota. El teletrabajo tiene estas cosas.